El huevo es uno de los alimentos naturales más completos que podemos ofrecer a nuestros perros o gatos como complemento en su dieta habitual. Es una excelente fuente de proteínas de alta calidad, ácidos grasos esenciales, vitaminas y minerales, y puede suponer un impulso significativo para su salud general. Es muy beneficioso para mejorar el estado del pelo y la piel, contribuir al desarrollo muscular y apoyar el sistema inmunitario. Además, tiene una excelente digestibilidad, por lo que es bien tolerado por la mayoría de animales.
A pesar de todos estos beneficios, sigue existiendo cierta controversia en torno a su consumo, y especialmente a comerlo crudo. Muchas dudas giran en torno a si el huevo crudo es seguro, si puede causar problemas digestivos o si disminuye la absorción de ciertos nutrientes. Pero lo cierto es que, cuando se ofrece correctamente y con sentido común, el huevo crudo puede formar parte de una alimentación natural saludable.
De hecho, no solo se puede ofrecer el huevo entero, sino también la cáscara de huevo, que es una fuente natural de calcio muy interesante para animales que no consumen huesos carnosos. A continuación, te cuento con más detalle cuándo conviene dar huevo, cuánto y cómo, ¡no te lo pierdas!
¿Cuándo es especialmente recomendable dar huevo?
Complementar la dieta de tu peludo con huevo puede ser especialmente beneficioso en ciertas etapas de su vida o en situaciones concretas donde sus necesidades nutricionales aumentan. Por ejemplo, es una ayuda excelente para perras y gatas que están lactando o embarazadas, ya que necesitan un aporte extra de proteínas y nutrientes para mantenerse fuertes y cuidar de sus crías. También resulta ideal para cachorros a partir de los tres meses de edad, cuando están en pleno desarrollo y crecimiento muscular.
En el caso de perros mayores que gozan de buena salud inmunitaria, el huevo puede servir como un refuerzo suave y natural para mantener su vitalidad. Y si tu compañero es un perro muy activo o incluso un atleta canino, el aporte proteico del huevo le ayudará a recuperar energías y mantener su masa muscular en buen estado.
Incorporar este alimento de forma puntual puede marcar una gran diferencia en su bienestar, siempre que se haga de forma controlada y adaptada a sus necesidades individuales.
¿Cuánto huevo puedo darle a mi perro?
Aunque es un alimento saludable y lleno de beneficios, es importante no pasarse con la cantidad. Como ocurre con cualquier suplemento o complemento en la dieta, el equilibrio es clave. El huevo debe considerarse como un refuerzo ocasional dentro de una alimentación ya completa, no como un sustituto de otros ingredientes esenciales.
Cada peludo tiene sus propias necesidades según su tamaño, su nivel de actividad, su edad y su estado de salud, pero para que te hagas una idea clara, te dejamos una recomendación general orientativa:
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Perros pequeños o gatos: 1 huevo a la semana o 2 huevos de codorniz
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Perros medianos: 2 huevos a la semana
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Perros grandes: 3 huevos a la semana
Recuerda: nuestros menús BARF ya son completos y balanceados, por lo que no es necesario añadir complementos. Pero el huevo puede ser un extra saludable.

Mitos comunes sobre el huevo crudo y los perros
Hay muchos beneficios para la salud al consumir huevos de forma regular, sin embargo, a menudo los mitos que rodean el consumo de huevos en crudo nos acechan. Uno de ellos es el que dice que al consumir el huevo en crudo, la proteína llamada 'Avidina' reduce la absorción de la Biotina. Esto no es cierto ya que hay un exceso de Biotina en el huevo y, por lo tanto, se contrarresta la acción de la Avidina, ¡así que no hay de qué preocuparse!
Otros cuestionan el vínculo entre los huevos crudos y la salmonella. Un perro o gato alimentado de manera natural tiene el estómago repleto de bacterias buenas junto con un PH muy ácido que hace que esto no sea un problema para ellos.
Eso sí, debemos tener cuidado de no pasarnos, por eso te explicamos sencillamente la cantidad de huevo a la semana que puedes dar a tu peludo según tu tamaño.
Consejos para ofrecer huevo
¿Y si mi perro no quiere comer el huevo crudo?
Puedes probar a cocerlo ligeramente o pasarlo por la sartén, ya que algunos perros y gatos prefieren la textura cocinada frente a la del huevo crudo. Antes de llegar a eso, te recomendamos hacer una primera prueba sencilla: añade un poco de huevo crudo en un rincón del plato, separado del resto de la comida habitual. De este modo, podrás ver si le interesa sin que afecte al resto de la ración ni mezcle sabores.
Si ves que no le llama la atención o que lo rechaza, entonces puedes cocinarlo ligeramente. Puedes probar con huevo duro, huevo pasado por agua o incluso una tortilla sin sal ni aceites añadidos. Al cocinarlo, el aroma se intensifica, lo que puede hacerlo más apetecible para los animales más exigentes o aquellos que no están acostumbrados a la textura del huevo crudo. Recuerda dejarlo enfriar antes de ofrecerlo y observar su reacción: cada animal tiene sus gustos.
¿Y qué pasa con la cáscara del huevo?
Si su perro no come CRU ni BARF casero, lo más probable es que no esté consumiendo huesos carnosos. En este caso, te recomendamos añadir también la cáscara de huevo para mayor aporte de calcio y minerales.
¿Cómo prepararla? ¡Ojo, presta atención!
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Usa únicamente huevos ecológicos de origen seguro
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Lava bien la cáscara
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Sécala y machácala hasta hacerla polvo fino con un mortero o tritúrala junto con el huevo con una batidora de brazo
De esta forma facilitarás la absorción del calcio y otros minerales.
El huevo es un superalimento natural, sencillo y económico. Una pequeña mejora que puede tener un gran impacto en la salud de tu peludo.¿Te animas a probarlo?
¿Preparas una dieta casera natural sin huesos carnosos?
En este caso sí o sí debes suplementar con calcio, éste es esencial para el equilibrio mineral y la salud ósea de tu peludo. Nuestro suplemento de Cáscara de Huevo es ideal para ello. Puedes contactarnos para cualquier duda sobre como usar este suplemento.